En esta edición nos visitó probablemente el mejor autor internacional del año, el gran Pierre Lemaitre, creador de la serie del comandante Verhoeven y de otras grandes historias de género.
En esta edición nos visitó probablemente el mejor autor internacional del año, el gran Pierre Lemaitre, creador de la serie del comandante Verhoeven y de otras grandes historias de género.
La presencia del autor francés coincidió con la publicación en nuestro país de su última novela, Camille (Alfaguara). Pudo recoger el premio a la mejor novela extranjera de la tercera edición de Valencia Negra por Vestido de Novia (Alfaguara).
La representación internacional se completó con la presencia de Antonio Manzini, que presentó la tercera entrega del subjefe Rocco Schiavone.
La asistencia de Antonio Manzini y Pierre Lemaitre levantó una gran expectación en los medios y el público sobre la edición de este año.
Rosa Montero y José Carlos Somoza hablaron sobre los puntos de contacto entre sus obras y el género negro, una propuesta que consiguió llenar el salón de actos de la Fundación Bancaja.
La Sala Russafa representó una versión dramática de La Soga, la película de Hitchcock, un montaje creado expresamente para esta edición.
En esta cuarta edición alcanzamos las 75 actividades y las 21 sedes, lo que permitió duplicar el público asistente durante los 10 días del festival con respecto a la anterior edición.
Fernando Marías deleitó al público con su monólogo Esta noche moriré, una forma novedosa y original de presentar su obra literaria.
Valencia Negra “fichó” para esta nueva edición a los mejores autores españoles de novela negra, como Lorenzo Silva, Reyes Calderón, Toni Hill, Ignacio del Valle, Empar Fernández, Aro Sáinz de la Maza y Susana Hernández, entre otros.
También tuvimos espacio para debatir sobre algunos referentes desaparecidos del género: Rafael Chirbes (que resultó ganador del premio Francisco González Ledesma) y Rafael Tasis, creador del género negro en catalán.
María Oruña, Juan Bolea, Juan Gómez Jurado, Jordi Llobregat y Mikel Santiago, entre otros, tampoco quisieron perderse la cuarta edición de Valencia Negra.
La variedad de las actividades fue asombrosa: junto a las habituales charlas disfrutamos de actividades infantiles, encuentros en bibliotecas, taller de guión, charlas de la policía sobre el maltrato de género o crímenes sin resolver. También hablamos de la corrupción y sus consecuencias sociales.
Terminamos el festival con unas firmas en la calle, invitando al público a acercarse a los autores con jamón y vino para todo aquel que comprara sus obras literarias.
Los organizadores de Valencia Negra, más que nunca, se dejaron la piel y se mojaron para que el festival continuara creciendo. ¡La quinta edición promete más y mejor!.