Abierto a todo el público, este certamen premia los mejores textos publicados con el hashtag #140tirs en la red social Twitter, donde se desarrolla nuestro concurso de microrrelatos de temática negra.

El osito yacía en un halo de relleno. La cabeza se desinflaba, fofa, entre pellas de lana. —Malo —escupió su asesino—. Zito malo. (@Daurmith)

Hablaba por los codos. Tuvimos que amputarle los dos brazos para que se callara. (@FrancescBarbera)

No sólo la matanza fue espantosa, sino que encima me equivoqué de restaurante. (@odradek1)

Cuando se estableció la ley seca descendió de forma considerable la venta de paraguas. (@Lag_Juancho)

Le pedí, amablemente, la mano de su hija. Pero se negó. Así que no tuve más remedio que cortársela. (@FrancescBarbera)

La Fiscalía pidió 15 años de prisión para aquel hombre acusado de ahogar a su esposa en un mar de lágrimas. (@microrelatate)

-Yo, de mayor, quiero ser jardinero, como tu padre. Ir por ahí con la pala y la motosierra.
-Jardinero, dice. (@melmastia)

El informe de la autopsia de anoche certifica que el forense bebe más de la cuenta en su puesto de trabajo. (@NicolasJarque77)

Alguien a quien no conocía de nada le seguía y parecía conocer todos sus movimientos. La policía le dijo que era normal en Twitter. (@mikealicante)